Llevamos recorrido la mitad de nuestro viaje. Los posts de estas semanas nos han ayudado a descubrir esa luz maravillosa, a ser conscientes de que todos tenemos nuestra propia luz, y a darnos cuenta que para que esa luz se mantenga activa y brille, lo primero que debemos hacer es creer en ella. En todo viaje hay momentos menos fáciles, y hoy ha llegado esa parte del trayecto. ¡Aquí comienza este nuevo post!
¿Luz y oscuridad?
Hablar de luz y oscuridad puede sonar un poco “abstracto”, pero es como nos sentimos cuando estamos en un lado o en otro. Cuando comencé a creer en mi luz, estaba muy motivada, me sentía con energía, con fuerza…pero siempre ocurría algo, ya fuera en mi interior o exterior, que hacía que esa luz volviera atrás, dejando paso a la oscuridad.
Al igual que existen el día y la noche, también existen la luz y la oscuridad, y sin una no existiría la otra. Si la oscuridad es lo contrario a la luz entonces podíamos definirla como la suma de no ser nosotros mismos y no hacer aquello que amamos.
La verdad es que estar en la oscuridad era muy frustrante, y lo sigue siendo muchas veces, porque me desanimaba pensar que estaba dando pasos atrás. Mi primera reacción era enfadarme conmigo misma o con los demás, al pensar que no estaba consiguiendo hacer brillar mi luz. Buscaba una solución inmediata, no quería tener oscuridad en mi vida. Me proponía hacer respiraciones profundas, ejercicios que me ayudaran a calmar la mente y despejarla…y muchas cosas más. Pero como podéis imaginar, siempre volvían a aparecer esos momentos en los que sentía que mi luz daba marcha atrás.
Cuando estamos en la oscuridad
Hace poco viví un momento así, y fue de los grandes…porque además llevaba unas semanas sintiéndome con más luz que nunca. Tardé unos días en mantenerme neutra, en no tener ese miedo que puede surgir y que a veces nos hace dudar de nuestra propia luz.
Durante estos días de “neutralidad” no paraba de preguntarme cómo podía ser que me siguiese afectando tanto el volver a la oscuridad, cómo podía ser que volviera por motivos similares. Entonces comencé a meditar más, no solo por la mañana, pero también por la noche. Meditando me concentraba simplemente en estar presente, en despejar mi mente, en estar aquí y ahora. Esto me ayudaba a mirar hacia adentro, a intentar escuchar esa vocecita que todos tenemos y que sabe cuál es nuestro camino en cada momento de nuestras vidas. Esa voz que solo podemos escuchar cuando encontramos silencio en nosotros mismos. Entonces me di cuenta de que hay cosas, personas, aspectos personales, que muchas veces no podemos cambiar y es ahí donde encontramos algo muy grande, que nos hace crecer: ACEPTAR.
Siempre hay luz en la oscuridad
No debemos intentar hacer desaparecer o pelear con la oscuridad, sería una batalla perdida. La clave es aceptarla. Aceptar que existe, aceptar que forma parte de nuestras vidas, y tomar la decisión de aprender a ver las estrellas cuando nos encontremos en esos momentos de oscuridad. Aprender a afinar nuestra vista para apreciar esas estrellas en medio de la noche. Porque la noche acaba, y después llega de nuevo la luz del día.
Esto es lo mismo que ocurre en nuestras vidas. Hay veces que nos perdemos, y permanecemos en la oscuridad mucho tiempo. Pero tengo buenas noticias, y es que ya estás en el camino de tu luz, ya eres consciente de tu luz interior, ya crees en ella….y ahora ha llegado el paso de aceptar la oscuridad. Porque detrás de esa oscuridad, lo que hay es más luz. En la propia oscuridad hay luz, que serían las estrellas, el aprendizaje, el crecimiento interior de cada experiencia.
Si cada vez que llega la noche nos centramos en buscar las estrellas, entonces nuestra luz se hará más fuerte. Y así viviremos siempre con luz, incluso estando en momentos de oscuridad. Porque al final si afinamos la vista seremos capaces de ver cada vez más estrellas en la oscuridad, y sin darnos cuenta, volverá a llegar la luz del día.
Pasos para encontrar la luz en la oscuridad:
- Acepta que hay momentos de oscuridad, no los juzgues, no los intentes eliminar
- En los momentos de oscuridad busca las estrellas, mira arriba y encuentra su luz
- Escucha a tu voz interior, y aprenderás cada vez que vuelvas a la oscuridad
- Recuerda que tienes luz en tu interior, al igual que esas estrellas
- Recuerda que vuelve a salir el sol, y tu luz brillará más fuerte
La oscuridad nos ayuda a descubrirnos, nos ayuda a entender que la luz existe incluso en ella. En nuestra mano no está eliminar la oscuridad, en nuestra mano está elegir buscar las estrellas cuando llega la noche. En nuestra mano está ser conscientes de nuestra luz, creer en nuestra luz, y elegir buscar nuestra luz aunque haya oscuridad.
Acepta, abre tu corazón, calma tu mente, respira profundo, siente tu luz…y ¡nunca dejes de brillar!
With light, V.